El día soleado y las pocas ganas de salir

El día soleado y las pocas ganas de salir

Lo que me pasa siempre...

La vista más bella de la noche.

Nada de buenas a nadie. Hoy es un día bastante espantoso... afuera esta soleado, las aves cantan y se escuchan a los niños gritar de alegría en el parque a media cuadra de mi casa. ¡ES UN DÍA ASQUEROSAMENTE HORRIBLE!.

Odio el sol con fervor, los niños corriendo y gritando por ahí me irritan y las aves... bueno, las aves no me molestan, son relajantes cuando hay poca gente por la calle. Pero odio los días como estos, tan alegres; es irritante ver a tanta gente por la calle, yendo y viniendo en todo momento sin descanso. No puedo tolerar más de un minuto afuera con un día como este, por eso prefiero encerrarme en mi casa y estar ahí hasta la noche (porque soy medio vampiro y el sol me quema) Pero mas allá de todo, prefiero la noche... momento donde la ciudad se calma. Cuando puedo ver las luces de los faroles en un principio encenderse de forma intermitente para finalmente terminar encendidas de forma continua hasta el amanecer próximo. Cuando puedo ver como los niños que tanto me irritan con sus gritos y brusquedades, se esfuman bajo el oscuro cielo nocturno. Cuando las aves calman sus cantos lentamente hasta ocultarse entre las sombras de los arboles. Son esos los momentos más tranquilos y agradables para mi persona; momentos que únicamente se presentan bajo la luna y las estrellas que se encuentran en el lejano cielo de la noche.

¡ME ENCANTAN! los momentos de tranquilidad que se presentan entre las sombras detrás de los faroles encendidos, incluso las intermitentes. Muy probablemente muchísimas personas compartan esta preferencia conmigo por razones similares a las mías... a esas personas les quiero decir que saben apreciar los buenos momentos, saludos.